Elimina de inmediato cualquier derrame de comida y alimentos al descubierto, especialmente cuando están cerca de electrodomésticos.
Almacena la comida en envases herméticos o sellados.
Mantén el fregadero despejado de platos sin lavar.
Vacía la basura regularmente y asegúrate de que la bolsa esté bien cerrada.
Deshazte de las cajas y los periódicos viejos, ya que son lugares propicios para que las cucarachas se escondan.
Realiza una limpieza periódica del refrigerador, el horno, el microondas y la tostadora. Además, no te olvides de pasar la aspiradora debajo y detrás de estos electrodomésticos para eliminar restos sueltos de comida.
Mantén alejados los alimentos de las áreas de descanso y las habitaciones.
Asegúrate de mantener las áreas de almacenamiento secas, ya que estas plagas son atraídas por la humedad.
CIERRA LOS PUNTOS DE ENTRADA PARA MANTENER A LAS CUCARACHAS MINÚSCULAS ALEJADAS Sella las grietas y hendiduras donde las cucarachas pequeñas tienden a esconderse.
Cierra cualquier abertura por la cual puedan ingresar desde las viviendas vecinas.
EVITA LOS ERRORES COMUNES EN EL CONTROL DE LAS CUCARACHAS MINÚSCULAS No coloques cebo o gel para combatir las cucarachas en áreas que hayan sido rociadas previamente con insecticida líquido o en aerosol. Esto es fundamental, ya que las cucarachas que pasen por zonas rociadas morirán antes de poder llevar el cebo a sus nidos.
No apliques insecticida líquido o en aerosol sobre el cebo, ya que las cucarachas no lo consumirán.
Asegúrate de eliminar otras fuentes de comida y agua que compitan con el cebo y el gel, de esta forma, obligarás a las cucarachas a consumir el cebo.
Reemplaza los cebos para cucarachas siguiendo las indicaciones de la etiqueta o cuando las cucarachas los hayan consumido por completo.
Mejora la eficacia en el control de las cucarachas pequeñas colocando más cebos y situándolos más cerca de los lugares donde se ocultan durante el día.